¿Merece la pena comprar zapatillas para pronadores o supinadores?
Cada uno tenemos una manera diferente de pisar, por las peculiaridades de nuestros pies. Básicamente y para entendernos, los supinadores apoyan más la parte externa de los pies, mientras que los pronadores cargan más peso en la interna; pero ésto ocurre en distintos grados: dentro de los pronadores, los habrá de mayor o menor intensidad, etc.
Puestos a hacernos un estudio de la pisada, yo recomiendo acudir a profesionales de los pies, como las escuelas de podología o determinadas clínicas podológicas.
Es importante que la exploración sea personalizada, finalizando con la prescripción de unas plantillas específicamente diseñadas para nosotros, que solventen las debilidades y alteraciones de cada uno de nuestros pies.
Las zapatillas para pronadores o supinadores, sólo tienen en cuenta ese factor, realizando una corrección parcial de la pisada, mientras que con una plantilla fabricada a nuestra medida y con el molde de nuestro pie, metida en el interior de una zapatilla normal, conseguiremos solventar todas las carencias que presentemos: pequeños acortamientos de una pierna respecto a la otra, pronaciones y supinaciones en diferentes grados, exceso de apoyo en la parte delantera o trasera del pie…
Lo ideal sería hacerse un estudio biomecánico, de la pisada estática y de la marcha. Cuanto más completo, más datos obtendremos y mejor podremos corregirlos. Pero en cualquier caso, las cosas de la salud, mejor siempre personalizadas en lugar de genéricas.